Entrevistamos por el Día Internacional de la Mujer a Esther Aguirre Zamora, presidenta del Fórum de Jóvenes, y a Cristina Fuentes Cegarra, vicepresidenta del Fórum de Jóvenes. Ambas nos cuentan su experiencia como mujeres en posiciones de liderazgo que han tenido que desafiar a los estereotipos de género y trabajado por preservar sus valores en la tercera generación de la empresa familiar.
- ¿Cómo ha sido tu trayectoria profesional hasta convertirte en gerente de tu empresa familiar?
Cristina Fuentes: Llevo toda la vida en la empresa familiar. Mis abuelos vivían en una casa al lado de la empresa, lo que provocaba que la mayoría de las visitas a la familia se realizaran allí.
Desde que estaba en segundo de carrera comencé a trabajar por las tardes como auxiliar administrativa y, poco a poco, fui aprendiendo hasta convertirme en gerente de una de las empresas del grupo: Piscifactorías del Mediterráneo. Han pasado unos cuantos años ya.
Esther Aguirre: Mi evolución fue muy natural porque nunca ambicioné para estar en la empresa familiar. Cuando terminé la carrera, estuve trabajando durante seis años en una consultaría de Murcia. Ahí fue cuando mi tío Emilio me reclutó y empecé a prestar servicio para la compañía. Después de eso, he evolucionado progresivamente y, con mucho esfuerzo, trabajo y dedicación, he ido adquiriendo cada vez más responsabilidades hasta llegar a mi puesto actual.
- ¿Cuáles han sido los mayores desafíos a los que te has enfrentado como mujer en un puesto de liderazgo?
Cristina Fuentes: El de la pesca y la acuicultura es un sector en el que predominan los hombres. Por eso, sí que me he encontrado, sobre todo cuando empecé hace 20 años, con caras de asombro o conversaciones filtradas, pero poco a poco es cuestión de hacer músculo. La gente de termina acostumbrando. Es muy importante expresarte y dar tu opinión para que se te tenga en consideración y esas limitaciones y estereotipos se acaben eliminando.
Esther Aguirre: Retos hay muchos, al final esto es como una carrera de obstáculos. Destacaría el ser capaz de poner en valor mi trabajo sin tener la necesidad de buscar la validación ajena y tener la confianza en mí misma para saber que el trabajo que desempeño es de calidad y que soy merecedora de la posición que ostento.
Otro de los grandes retos ha sido conciliar mi vida personal, mi doble maternidad, con mi carrera profesional, que ha ido creciendo a lo largo de los últimos años.
- ¿Hay algún legado o valor que te parezca esencial preservar?
Cristina Fuentes: En la empresa familiar, lo más importante es preservar la unidad. Valores como el esfuerzo, la humildad y el compromiso con la tierra, con nuestra gente y con el emprendimiento.
Esther Aguirre: Salvaguardar la cultura del esfuerzo es clave. Es importante que las nuevas generaciones entiendan que, para alcanzar tus objetivos y llegar a determinadas posiciones, es fundamental el esfuerzo y la dedicación. Nadie regala nada y, en la empresa familiar, suele pasar que por pertenecer o estar ligado a la familia parece que se te ha regalado y no es para nada así. Emprender requiere mucho esfuerzo y dedicación.
Otro valor que nunca se debe de perder es la humildad: mirar atrás y saber de dónde vienes es importante para valorar lo que tenemos.
- ¿Qué consejo le darías a las jóvenes que aspiran a liderar y emprender en el mundo empresarial?
Cristina Fuentes: Lo más importante es que estén seguras de que les gusta y, si lo tienen claro, que pongan el foco en esa meta y se centren en conseguirlo. Les aconsejo que empiecen lo antes posible a acudir a asociaciones y grupos en los que puedan practicar sus habilidades de liderazgo.
Además, tener un mentor es fundamental. Si tienen la suerte, como he tenido yo, de tener a tu padre o a tu madre en la empresa familiar, pegarse a ellos y empaparse de todo será la mejor forma de aprender.
Esther Aguirre: Es muy importante estar formándose continuamente. Nos encontramos en un entorno muy cambiante e incierto que requiere una constante actualización. Al final cuando tienes una posición de responsabilidad es muy importante saber qué pasa en tu entorno para saber adaptarte.
De igual modo, tener referentes de calidad, que te aporten y que te sirvan de inspiración, es clave. Al final, con días como el de la mujer en el que se ponen en valor referentes femeninos en todos los sectores y áreas es muy positivo. Ahora afortunadamente todos tenemos acceso a la información, aprovechémosla para aprender y poder inspirarnos de personas que merezcan la pena para desarrollarnos profesionalmente.